- Si... el proyecto va genial, estaba yo pensando que se cómo hacer un fuego para el rincón de la prehistoria y que podamos comer todos a su alrededor, ahora que ya lo hemos descubierto en clase...
- Os lo hago yo si quieres...
- Que nos lo haces? Eso sería fantástico!!
Por cierto, Gracias papá de Paula.
Dicho y hecho, nos trajeron el fuego a clase.
Nos gustaba mucho almorzar alrededor del fuego... de hecho lo pedían ellos cuando empezábamos a almorzar.
Aprendimos a ser más autónomos y responsables, pues había que coger toallita y limpiarse las manos antes de sentarse en la alfombra (ellos mismos se lo recordaban unos a otros), y tener muuuucho cuidado porque ahora comían encima de sus piernas como en aquella época, así que había que tener más cuidado de no derramar nada.
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